A la mayoría de las personas les enseñaron que desde pequeños no se deben meter en discusiones de parejas, porque cuando una pareja se pelea el tercero que se mete a defender ya sea al hombre o a la mujer siempre va a terminar como culpable y en pocas palabras como un metido.
Muchos habrán tenido la experiencia en algún momento de sus vidas de haberse metido en alguna discusión de pareja y lo que salieron fue perjudicados y prácticamente culpables por haberse metido a opinar o a defender a un miembro de la pareja, recuerda esto muy bien, así sea un familiar o amigo cercano no te metas nunca a opinar sobre discusiones de pareja, porque de verdad el que va a salir perdiendo vas a ser sólo tú.
En problemas de dos, el tercero siempre va a sobrar, porque cuando ellos se vuelvan a perdonar y regresen nuevamente el que va a quedar mal eres tú. Después van a salir con chismes de que tú dijiste aquello y que dijiste lo otro y simplemente resultaras siendo el malo de la película.
Ahora si por casualidad estás presenciando una pelea agresiva de pareja de un familiar cercano o una amistad, y tu intervienes para calmar los ánimos pero después los ves como si nada hubiese sucedido y tú quedas como el metido, es mejor que procures mantenerte al margen de sus discusiones.
La relación de pareja puede ser muy linda, pero cuando se meten otros a opinar en una discusión después van a salir indirectas y comentarios indebidos por haberte metido a abogar. Al final de todo ellos decidirán si van a seguir bien como pareja que son y recuerda que un tercero no tiene porque meterse a opinar.
En una relación si no hay amor y no hay respeto, no habrá un amor mutuo, muchas veces una relación cae en un círculo vicioso de falta de amor, de falta de respeto y por eso entran en conflicto y discusiones, pero lamentablemente nadie debe meterse en peleas de parejas porque como ya lo mencionamos anteriormente, saldrá perdiendo la persona que se meta a defender a uno de los dos.
Pídele a Dios que te de a ti esa fortaleza de cumplir tu parte de no meterte en asuntos ajenos, preocúpate sólo por ti y si también tienes pareja, no dejes que nadie se meta a opinar sobre tu relación porque eso tampoco está bien, y recuerda esto por última vez, no te metas en peleas de parejas porque en la selva cuando las ramas se pelean las raíces se abrazan.