Son personas muy lindas, siempre tienen una gran actitud para dar y recibir afecto, son muy dulces, sensibles y llenas de bondad, también tienen una fuerza de voluntad muy grande para resolver problemas o cuando tienen obstáculos por delante y los quieren superar claro está teniendo las herramientas necesarias y la estimulación para su crecimiento lo hacen con mucho cariño y buena actitud.
El Síndrome de Down es una de las alteraciones genéticas caracterizado por la aparición de un cromosoma extra en el genoma humano. La educación para ellos comienza desde que nacen porque es muy importante la estimulación temprana porque ellos aprenden de diferentes maneras con un tiempo determinado.
Este síndrome fue descubierto por Langdon Down en el año de 1866, este es de los pocos trastornos genéticos donde existen cromosomas de más compatibles con la vida. Hay estudios que arrojaron datos que de cada mil nacimientos en el mundo, un niño nacerá con Síndrome de Down.
Lo más seguro es que conoces a alguien con este Síndrome que tiene estos rasgos particulares como por ejemplo, tienen estatura baja, cabeza redonda, la lengua es sobresaliente, las manos son anchas y cortas, su tono muscular es bajo.
Las personas con Síndrome de Down tienen una esperanza de vida más corta de lo normal, aproximadamente es de 50 años, gran parte de la mortalidad es porque estas bellas personas son muy propensas a enfermedades respiratorias, a malformaciones cardíacas y además de tener una incidencia de leucemia 20 veces mayor que la de la población normal.
La causa de muerte en adultos con Síndrome de Down se debe frecuentemente a la enfermedad de Alzheimer, todo lo mencionado es consecuencia de un pequeño error genético el cual resulta como la aparición de un cromosoma extra.
Para esas lindas personas hay que proporcionar muchísimos estímulos visuales en los aprendizajes, porque su canal de aprendizaje casi siempre va a ser visual, se le deben colocar tareas accesibles para poder alcanzar las respuestas de los aprendizajes o de los objetivos propuestos.
Se les debe dar mucho apoyo emocional para que ellos puedan tener una actitud lo más positiva posible y puedan así alcanzar sus objetivos propuestos. Las mujeres que superan los 35 años de edad corren mayor riesgo de tener un hijo con Síndrome de Down.
